En 1967, año
de fundación de la Confederación Latinoamericana de Trabajadores Estatales
(CLATE), América Latina respiraba en una atmósfera de efervescencia enmarcada
por la Guerra Fría, dictaduras y gobiernos conservadores de la región. El campo
popular discutía las mejores vías y formas organizativas para la liberación,
mientras sufría a la vez el hostigamiento de los gobiernos autoritarios.
Bajo este
difícil contexto, surgieron los primeros contactos entre las organizaciones
hermanas que se establecieron en 1965 con la visita de una delegación sindical
argentina a la Asociación Nacional de Empleados Públicos Fiscales de Chile
(ANEF), presidida en ese entonces por Tucapel Jiménez, asesinado años después
por la DINA (Dirección de Inteligencia del dictador Pinochet). Por su parte,
los compañeros de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado
de Uruguay (COFE), arribaron a Buenos Aires para impulsar el llamado a un
primer congreso de la CLATE, que se extendería luego por el Caribe, Pacífico y
Centro América.
Organizaciones
sindicales de trabajadores del Estado de 13 países viajaron en un clima de
muchas limitaciones y exterma austeridad- en duros asientos de colectivos urbanos
a la ciudad bonaerense de Chapadmalal. Imposible sería no mencionar a algunos
de los destacados dirigentes presentes, como Amancio Pafundi y Carlos Custer
que tuvieron importantes responsabilidades en ATE-; Saturnino Soto y José
María Saravia (UPCN) de la Argentina; Luis Iguini de la COFE de Uruguay y
primer secretario general de la CLATE; Hector Santibáñez y Ricardo Bayardo
González enviados por la ANEF de Chile-; compañeros de la Asociación de
Empleados y Obreros Municipales de Uruguay (ADEOM) y la gran Confederación de
Servidores Públicos de Brasil (CSPB), quizás la más representativa de todas las
organizaciones en términos numéricos, con grandes dirigentes como Bisnair
Maiani y Helio de Mello.
DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS Y OBJETIVOS
Hoy, tras 49 años, el texto fundacional de la CLATE tiene una vigencia extraordinaria y
una potente perspectiva.
A continuación
reproducimos la declaración de principios y objetivos elaborada por el I
Congreso de la CLATE en Chapadmalal (Argentina) en febrero de 1967:
CLATE es una organización sindical
internacional que agrupa a los trabajadores estatales de las hermanas naciones
de América Latina, con pleno respeto de las entidades afiliadas a ella, siendo
encargada de fijar y ejecutar a nivel latinoamericano, la política global y
coordinada de la promoción de los trabajadores estatales
Los servidores públicos y sus
organizaciones, agrupados en la CLATE imbuidos de un espíritu humanista y
latinoamericano, bregarán por la significación humana de los trabajadores, por
su promoción total y plena participación en todos los resortes del poder
político, económico, social y cultural, en sus respectivas comunidades
nacionales, por el efectivo y fundamental respeto al valor del trabajo,
expresión directa de la persona humana, por una economía al servicio de todos
los seres humanos y sus necesidades con plena participación de los
trabajadores, en forma activa y responsable en la conducción y decisión de la
gestión económica y, en definitiva, por el conjunto de valores y medios que tiendan
a un orden social basado en la justicia y en la solidaridad, que permita a
todos los sectores del pueblo el acceso a los bienes, a la cultura y al poder
Como integrantes de la clase
trabajadora latinoamericana, los servidores públicos del continente expresan su
firme actitud revolucionaria frente al capitalismo y a cualquier otra forma de
tutela o de presión extranjera; señalan la firme esperanza de una América
Latina libre, independiente y democrática; y afirman que únicamente un proceso
serio de integración latinoamericana, con efectiva participación de los
trabajadores, permitirá a nuestros países, lograr una verdadera
autodeterminación política, una real personalización internacional y
fundamentalmente, una autentica independencia económica, únicos medios
efectivos para derrotar al subdesarrollo, la aislación, la dependencia y la
miseria de nuestros pueblos
En definitiva la CLATE luchara por
los objetivos gremiales comunes de todos los servidores públicos del
continente. Serán primordiales banderas de lucha; la plena y absoluta libertad
sindical; el ejercicio efectivo del derecho de agremiación y huelga;
negociación colectiva; la promoción y estabilidad el servidor público; la
implantación y efectivo funcionamiento de la carrera administrativa; la dignificación
y jerarquización de la función pública y la participación del trabajador
estatal en todos los aspectos de interés social y laboral
Con la firme creencia de la validez
de lo aquí expresado, LA CONFEDERACIÓN LATINOAMERICANA DE TRABAJADORES ESTATALES
convoca a todos los servidores públicos del continente a la lucha común por
estos principios y objetivos y, a la vez, expresa sus votos de unidad y
solidaridad con todos los trabajadores de Latinoamérica y del mundo en la
consecución de los medios que hagan posible un orden social mas justo, la
efectiva y real determinación de los pueblos y la impostergable necesidad de la
paz mundial, basada en la justicia y en la libertad