Por todo ello, ATE convocará a una conferencia de prensa para el miércoles 13 a las 11 en la sede del Consejo Directivo Nacional.
En el año 2006, un grupo de trabajadores de ATE Neuquén, entre los que se encontraba el por entonces secretario general, Julio Fuentes, fue llevado a juicio por la denuncia del ex administrador del Instituto de Seguridad Social de la provincia, Gerardo Hettinger. El hombre decía haber sido maltratado durante una manifestación de reclamo sindical, realizada en enero de 2002. El fiscal de la causa, Rómulo Patti, desistió de acusarlos por determinar que no hubo delito, y por ello en 2007 la Cámara Primera los absolvió del cargo por coacción agravada en concurso real con lesiones leves y graves con daño agravado.
Hettinger apeló esa medida y logró que el Tribunal Supremo de Justicia provincial anulara el fallo en 2009 y convocara a un nuevo juicio por el mismo motivo, once años después de haberse sucedido el supuesto hecho. Este proceso es ilegal, porque la causa está prescripta de acuerdo a la ley. A esto se suma que el fiscal que interviene en la causa, el Dr. Pablo Vignaroli, tiene una hostilidad manifiesta contra Julio Fuentes y el resto de los perseguidos. Ello se debe a que años antes de que Vignaroli fuese designado en la causa, la dirigencia de ATE lo denunció ante el Consejo de la Magistratura por graves irregularidades en el ejercicio de su función. De acuerdo al artículo 47 del Código Procesal Penal de la Provincia de Neuquén, este Fiscal no puede intervenir en la causa.
Otro elemento que agrava esta serie de irregularidades es la posibilidad que hace horas se le concedió a la defensa para extraer fotocopias de un expediente de 10 mil fojas. A días de iniciarse el juicio, que se realiza al secretario general de ATE, Julio Fuentes, y a Horacio Fernández, César Sagredo, Miguel Peralta y Ricardo Pérez, se hace imposible ejercer debidamente el derecho de defensa.