El secretario general adjunto de la CLATE y director de Relaciones Internacionales de la Confederación de Servidores Públicos de Brasil (CSPB), Sergio Arnoud, analizó la compleja situación que vive su país, las precarias condiciones de trabajo del personal de salud, así como la indiferencia y la falta de apoyo del gobierno de Jair Bolsonaro a la población más vulnerable.

En el marco de la campaña lanzada por la CLATE “Cuidemos a los que nos cuidan”, el dirigente de la CSPB afirmó que Brasil está viviendo una situación “de extrema dificultad” y que en 10 estados del país la situación es “pre caótica”. Arnoud explicó que la expansión del coronavirus y la falta de medidas de aislamiento y contención por parte del gobierno han colapsado el sistema de salud, con un promedio diario de 1.050 fallecidos y 50.000 infectados.

Además, informó que hasta el momento han fallecido más de 300 trabajadores del área de enfermería y auxiliares, así como más de 100 profesionales médicos. “Vivimos una situación muy delicada porque no tenemos Ministro de Salud hace más de dos meses. Tenemos un general interino que no tiene ninguna afinidad o conocimiento en esta área”, denunció.

“Mientras los hospitales de todo el país no tienen medicamentos para permitir la entubación de pacientes, el gobierno tiene un stock en el Ejército de 5 mil millones de píldoras de cloroquina, que no sirve para nada”, añadió Sergio Arnoud.

“Hay relatos de enfermeros y médicos que van al baño una o dos veces por día, como máximo, porque no tienen el equipo de protección para reemplazar, entonces no comen y no toman agua”, contó el dirigente.

El secretario general de CLATE señaló también que “el gobierno se aprovecha de este momento de caos para enviar una serie de proyectos al Congreso Nacional que son contrarios a los intereses de los servidores públicos y de los trabajadores en general”.

En ese sentido, explicó que las centrales sindicales están trabajando de forma unitaria “en una campaña por la democracia, por la vida, por la renta, por el empleo, por los derechos sociales y por la sustentabilidad”, a la que se han sumado más de 170 organizaciones sindicales y sociales en todo el país”.