Dirigentes sindicales de ATE y un policía resultaron heridos luego de un
enfrentamiento, habiéndose registrado un detenido, que minutos más tarde fue liberado por la presión que ejercieron los dirigente Pablo
Michelli, Fernando Acosta y un nutrido grupo de trabajadores que se
agolparon en las puertas de la central de policía.

La jornada de protesta de ATE se  realiza en el marco del plan de lucha lanzado por
este sector y se cumple desde hoy con un paro de 72 horas con
movilización.

La represión ocurrió en la intersección de calle
Belgrano y Sarmiento, frente de la Iglesia Catedral, donde un grupo de
más de cincuenta efectivos policiales formó un vallado humano e intentó
detener la marcha, evitando que llegara a Casa de Gobierno.

Al verse superados en números, el sub jefe de policía Fabián Sosa ordenó
reprimir con gases lacrimógenos, lo que generó la ira de los
manifestantes que arremetieron contra la fuerzas policiales, generándose
una fuerte disputa que duró no más de cinco minutos, hasta que pudieron
ingresar a la Plaza Belgrano y de allí a Casa de Gobierno.

Allí se armó una gresca entre estatales y efectivos policiales, lo que
provocó que varias personas tuvieran que ser asistidas por los efectos
de los gases lacrimógenos y balas de goma lanzados por la Policía. Entre
los heridos, hubo un efectivo policial.

A pesar de la resistencia policial, más de 3 mil trabajadores lograron romper la valla
de efectivos policiales y tomaron igualmente la Plaza Belgrano,
ingresando por Sarmiento y por calle Gorriti, donde las fuerzas
policiales ya no pudieron contener a los manifestantes.

Ante esta situación el dirigente Pablo Michelli, titular de la CTA Nacional,
destacó que este tipo de represión se está transformando en una
constante de los gobiernos de todo el país. “Responder ante el reclamo
justo de los trabajadores con violencia, me parece que no es bueno. En
la democracia los trabajadores tenemos derecho a ejercer la protesta
social, frente a la  ausencia de repuesta de parte de los gobiernos y no
tiene porque el gobierno a actuar de manera violenta, mandando a las
fuerzas represivas. Lamento que esto sea así, y apelo  al sentido común,
a la madurez del gobierno provincial para que pare con esto y arme una
mesa de diálogo para resolver los problemas”.

Uno de los detenidos, que luego fue liberado por la policía de la provincia,
denunció que fue golpeado dentro de la central. “Yo no estaba haciendo
nada, intentábamos llegar a la plaza y vino  gente de infantería y me
pegó. Entre ocho o nueve policías me llevaron rameando hasta dentro, 
donde me pintaron los dedos y me hicieron de todo”, denunció el
trabajador que presta servicio en la municipalidad de Perico.

La columna de manifestantes acampa actualmente en Plaza Belgrano y lo haría
hasta el viernes, fecha en que se realizará otra marcha en reclamo de
reivindicaciones laborales y salariales. .