Los gremios estatales peruanos, entre ellos, la Confederación Intersectorial de Trabajadores del Estado (CITE), miembro de CLATE, lograron acordar con el gobierno los lineamientos para la implementación de la ley de Negociación Colectiva en el Sector Público. El secretario general de la CITE, Winston Huamán, agradeció el apoyo del presidente de la CLATE, Julio Fuentes, y del presidente de ALAL, Matías Cremonte, quienes participaron de la última reunión entre los sindicatos y el Ejecutivo.
«Por fin podemos anunciar a los trabajadores y trabajadoras estatales de este país que se implementará la Ley de Negociación Colectiva, esperada después de muchísimos años en nuestra Patria», informó Winston Huamán, actual coordinador de la Unidad Estatal y máximo representante de la CITE, luego de recibir el texto definitivo del Decreto Supremo que se publicó este jueves en El Peruano, el diario oficial del país.
Estos lineamientos buscan ordenar la aplicación de la Ley 31188, aprobada en mayo de 2021, que establece la Negociación Colectiva en el Sector Público, un derecho fundamental que se le negó a los trabajadores estatales desde el año 1979.

«Lo fundamental es que el gobierno entendió la necesidad de que se garantice la viabilidad de los pactos colectivos en el presupuesto anual. Es decir que, a través del Ministerio de Economía y Finanzas, se asignen los presupuestos necesarios para la negociación centralizada y también descentralizada”, destacó el dirigente.
“Nos ha tocado a nosotros escribir esta historia y queremos dejar un legado hacia adelante para que el derecho fundamental de la Negociación Colectiva sea un hecho, una realidad”, manifestó Huamán.
«El país está ante la posibilidad histórica de iniciar un nuevo curso, de estar cada día más cerca de romper con ese modelo neoliberal que ha imperado en nuestro país durante tantos años», añadió.
«Ojalá que el gobierno entienda que de la mano con los trabajadores podemos avanzar y ojalá podamos hacer realidad esa posibilidad de modificar las políticas públicas, la política económica y la política laboral, a las que los gobiernos anteriores nos tenían sometidos», concluyó el representante de la CITE, quien además es secretario alterno de la CLATE para la Región Andina.
Apoyo de ALAL y de CLATE
Winston Huamán agradeció al presidente de la CLATE, Julio Fuentes, y al titular de la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas (ALAL), Matías Cremonte, quienes participaron este lunes vía zoom de la reunión que se llevó a cabo entre el gobierno peruano y los gremios estatales, en la que se acordaron los lineamientos para la Negociación Colectiva.
«Quiero expresar mi profundo agradecimiento al compañero Julio Fuentes y al compañero Matías Cremonte por su valiosa contribución y asesoramiento en esta lucha», afirmó Huamán.
En el encuentro, estuvieron presentes dirigentes de las organizaciones que integran la Unidad Estatal -la CITE, la UNASSE y la CTE– y representantes del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) y de la Autoridad Nacional del Servicio Civil (SERVIR). También asistieron distintos asesores, entre ellos, el Dr. Adolfo Ciudad Reynaud, quien coordinó el asesoramiento a los sindicatos.

Julio Fuentes celebró el acuerdo logrado por los gremios tras una larga lucha de más de 40 años. «En nombre de la CLATE, quiero felicitar a las organizaciones de la Unidad Estatal por esta importante victoria y también saludar la decisión del gobierno del presidente Pedro Castillo de dar inicio al proceso de negociación colectiva en el sector público peruano. Esperamos que estos lineamientos se cumplan y que finalmente se garantice el ejercicio pleno y efectivo de este derecho fundamental, que era una deuda histórica con los trabajadores y trabajadoras estatales del Perú».

Para el presidente de la ALAL y también asesor letrado de CLATE, Matías Cremonte, “lo más importante es que a partir de ahora queda el camino allanado para que comience un camino de negociación colectiva libre y voluntaria, sin ningún tipo de condicionamientos, y se cumpla no solo con un derecho largamente postergado, sino con un anhelo de todos los trabajadores y trabajadoras y las organizaciones sindicales representativas de empleados y empleadas públicas en el Perú».