La Unión Ferroviaria de Uruguay, miembro de CLATE, junto a otras organizaciones sindicales, realiza ollas populares para atender a la población más vulnerable en medio de la crisis desatada por el coronavirus. Así lo informó su secretario general, Carlos Aramendi, quien además criticó las medidas anunciadas por el presidente Luis Lacalle Pou.

Aramendi, quien además es secretario alterno de Integración de la CLATE, explicó que desde que apareció el primer caso de coronavirus en el país, “más de 60 mil trabajadores han sido enviados al seguro desempleo y eso ha tenido un impacto económico muy fuerte en nuestra sociedad”.

El dirigente afirmó que a partir de ese momento “se comenzó a tejer una red solidaria” en Montevideo y en gran parte del interior, organizada por diferentes actores sociales, para atender a los sectores más desprotegidos.

“La Unión Ferroviaria hace su presencia solidaria, junto a seis sindicatos más, e instala una olla popular para asistir a los más necesitados, a aquellos que no los cubre el seguro desempleo, a las familias que están en la informalidad y a tantos otros a los que el gobierno no les ha dado ninguna respuesta”, señaló Aramendi.

“Estamos atendiendo a muchísimos compañeros y compañeras a través de viandas y con un plato de comida caliente”, destacó.

El titular de la UF también se refirió a las medidas anunciadas por el gobierno uruguayo para hacer frente a la pandemia, que incluyen la reducción por dos meses de los salarios de trabajadores públicos con mayores ingresos para financiar un Fondo de Emergencia destinado al combate del virus.

“Nos sorprende muchísimo que el presidente Lacalle Pou, invocando la solidaridad, trate de imponerla a través de una ley. A nosotros los trabajadores nadie nos va a venir a decir cómo se construye la solidaridad, cuando uno de los principales pilares de sindicalismo es justamente la solidaridad y la practicamos día a día”, manifestó Carlos Aramendi.

También señaló que la rebaja salarial se tendría que haber discutido con los trabajadores del sector público en el marco de la Ley de Negociación Colectiva, que “el propio Lacalle Pou desconoce por completo”.

El dirigente también advirtió que con esta medida “se está castigando al sector público”, pero “no se le está exigiendo al gran capital, a los dueños de la tierra, a la agroindustria, a las grandes superficies que hoy son los grandes beneficiarios por las masivas compras de las personas que han salido a abastecerse, tampoco se le pide a las grandes industrias farmacéuticas, que están teniendo una ganancia muy importante en estos días”.

“Se nos vienen tiempos difíciles, porque esta cuarentena que se está haciendo voluntariamente ha llevado a que el Uruguay entre en una crisis económica muy fuerte y el impacto va a ser en los próximos meses”, analizó el secretario general de la Unión Ferroviaria.

“Hay que seguir tejiendo solidaridad para seguir asistiendo a aquellos sectores más desprotegidos. Esta pandemia se enfrenta entre todos”, expresó.