Hablando en el Congreso de la CLATE, señalaron que hubo varias razones que motorizaron el golpe de Estado parlamentario que derrocó al presidente Fernando Lugo. Por un lado, la política social desarrollada por Lugo, priorizando a los campesinos y sectores más pauperizados. Explicaron que el anterior gobierno entregó subsidios a los más golpeados por las políticas neoliberales, pero no pudo desarrollar la prometida Reforma Agraria, “ya que Lugo jamás pudo acceder realmente al poder”.

Ofrecieron detalles también sobre las presiones que recibió el presidente destituido, por parte de las trasnacionales, como Monsanto, que hizo todo lo posible para que el gobierno aceptara una nueva semilla transgénica, y al ser rechazada la propuesta, comenzaron a hacer lobbie contra Lugo.

Martínez dijo que el empresario periodístico (dueño del reaccionario diario ABC Color) Aldo Zucolillo, “es también uno de los ejecutivos de la Monsanto, y es por ello que desde ese medio se acicateó permanentemente contra el gobierno.

Otro factor que tuvo que ver con la arremetida derechista es la campaña desarrollada por los llamados “brasiguayos”, latifundistas brasileños que se han apoderado de tierras de campesinos paraguayos, expulsándolos de las mismas, para sembrar soja.

Los dirigentes estatales paraguayos, reconocieron los errores de Lugo, al no denunciar con más contundencia todos estos ataques a la democracia, y sobre todo, la designación –después de la masacre de Curuguaty- del ministro de Interior, Candia Amarilla, “un hombre ligado a la extrema derecha del partido Colorado y represor del campesinado”.

Por último, exhortaron a los delegados reunidos en el Congreso de CLATE, a redoblar la solidaridad internacional y de denuncia del nuevo gobierno de Franco. “No vamos a entregar el proceso abierto en 2008, cuando elegimos a Lugo, y vamos a seguir movilizándonos para que la democracia sea restituida en nuestro país”, concluyeron.